A finales de 2016, el gobierno luxemburgués buscaba formas de atraer empresas de tecnología financiera (FinTech) y fomentar la inversión en ese ámbito. Tomando el pulso a la actualidad y con la sensación de que esto generaría una necesidad de talento especializado, un especialista local en contratación actuó rápidamente contratando a un consultor de FinTech específico. El encargo: reunir un grupo de candidatos en el sector emergente de las FinTech incluso antes de que llegaran las empresas.
Este pensamiento ágil y la respuesta rápida dieron pronto sus frutos cuando uno de los clientes llegó con una necesidad de contratación urgente en el ámbito de las FinTech: un experto en sistemas y seguridad que pudiera integrar sus sistemas con arreglo a las normas comunitarias y desempeñar otras funciones para la pyme. Incluso con un calendario ajustado, fueron capaces de dar una respuesta rápida. Gracias a la preparación previa, colocaron a un candidato experto en dos semanas. Un año después, el cliente sigue estando contento con la contratación, el candidato está prosperando y el especialista local en contratación, Badenoch + Clark, se ha convertido en un atractivo socio de contratación en el espacio de las FinTech en Luxemburgo desde puestos técnicos hasta mandos directivos (nivel C).
¿Qué lección aprendemos aquí?
Ser los primeros en identificar y prepararse para un mercado emergente ha ayudado a Badenoch + Clark a generar inmediatamente resultados de seis cifras en una nueva línea de negocio, con previsiones de siete cifras en los primeros cinco años. Nuestra experiencia de desarrollo en el espacio de las FinTech se ha especializado tanto que hemos contratado a un segundo consultor de FinTech específico con el fin de satisfacer las necesidades de nuestros clientes. Sin la agilidad y la perspicacia de identificar una necesidad futura, esto habría resultado imposible.
Hablamos mucho acerca de la agilidad, pero ¿qué es exactamente?
La palabra se define como la «capacidad para moverse de forma rápida y sencilla» o «para pensar y comprender rápidamente», lo que nos lleva a nuestra siguiente pregunta:
¿Qué es la agilidad en los negocios?
Las personas ágiles se mueven con celeridad y facilidad.
Aquellos con agilidad mental procesan y comprenden la información rápidamente.
Cuando se trata del negocio, la agilidad organizativa va un paso más allá: las empresas ágiles no solo perciben los cambios de mercado antes que la competencia, sino que los equipos también responden de forma rápida y se adaptan tanto para sobrevivir como para prosperar. De esta forma, las empresas ágiles se posicionan de tal forma que puedan aprovechar al máximo el cambio, evolucionando de tal forma que son capaces de convertir las nuevas tendencias en oportunidades clave.
«VUCA (volátil, incierto, complejo y ambiguo) es ahora una realidad bien consolidada del entorno empresarial dinámico en el que operamos», afirma Darren Robinson, responsable regional de Badenoch + Clark para Bélgica y Luxemburgo. «Y este hecho exige líderes con la agilidad necesaria para dirigir sus empresas de manera que sean capaces de adaptarse lo mejor posible a las circunstancias.»
¿Cómo puede incorporar esta mentalidad ágil a la empresa?
Las empresas pueden fomentar la agilidad en el lugar de trabajo con este triple enfoque:
Contratar estratégicamente, pensando en las competencias sociales. «Los candidatos fuertes intentan continuamente identificar oportunidades y anticipase a las necesidades», afirma Robinson. Intente contratar empleados adaptables que dominen el pensamiento flexible y la colaboración.
Gestionar con voluntad y confianza. Encargue a los líderes que centren la atención de sus equipos en obtener resultados positivos sin controlar cada detalle del camino hacia dichos objetivos. Los equipos deben autogestionarse de forma que puedan actuar en el marco de nuevos desarrollos, así que no limite la capacidad de tomar decisiones hasta convertirla en un cuello de botella de líderes de alto nivel. Anime a los trabajadores a adaptarse a lo largo del camino y a actualizar sus prioridades diarias según resulte necesario.
No espere la perfección. «La proactividad y la velocidad de implementación son fundamentales», explica Robinson. Realice pruebas constantemente y vaya siempre hacia delante entendiendo que todo se puede actualizar si es necesario. Aprenda de cada interacción y muévase para mejorar. Si los equipos esperan a tomar decisiones o lanzar un nuevo servicio hasta que alguien de las altas esferas lo considere perfecto, entonces su empresa puede perder la batalla ante un competidor más ágil.
En Badenoch + Clark, nuestro profundo conocimiento y amplia experiencia en la contratación de alto nivel nos ayuda a identificar y colocar candidatos ágiles que tendrán un impacto en su empresa.
Si está familiarizado con nuestra marca, habrá visto que tenemos un nuevo aspecto, reflejo de nuestro compromiso con ser ágiles, anticiparnos mejor a sus necesidades y estar siempre listos para ayudarle cuando nos necesite. Infórmese sobre cómo podemos colaborar con su empresa, incluida la contratación de miembros ágiles para su equipo. Esperamos poder colaborar en el futuro.
Fuentes:
https://en.oxforddictionaries.com/definition/agility